Política
El Equipo de Gobierno de Boadilla se querella contra Tomás Gómez
29 de Diciembre de 2008. 15:40
- Nota de Prensa Ayto. Boadilla del Monte
Transcurrido el plazo de 48 horas dado por el Equipo de Gobierno de Boadilla al secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, el Ejecutivo ha dado la orden de que se interponga una demanda contra él por calumnias.
Transcurrido el plazo de 48 horas dado por el Equipo de Gobierno de Boadilla al secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, el Ejecutivo ha dado la orden de que se interponga una demanda contra él por calumnias.
La semana pasada, y en un ejercicio de distracción ante el bochornoso espectáculo vivido en Pinto, Gómez manifestó que algo olía a podrido en Boadilla, declaración a la que el alcalde de Boadilla, Arturo González Panero, contestó instándole a acudir a un tribunal a formalizar sus acusaciones o en caso contrario interpondría una querella por calumnias, tal y como ha hecho.
La respuesta dada por el secretario general socialista ha sido calificada por el Ejecutivo de Boadilla de increíble. Gómez apoya sus argumentos en las actuaciones de un terrateniente de Boadilla que ha perdido desde 1999 más de 40 juicios contra el Ayuntamiento de Boadilla del Monte. En sus declaraciones ni siquiera hace mención a los concejales de su Grupo Municipal.
De hecho, Ángel Galindo Álvarez, es el continuador político de su padre Ángel Galindo Torres. Galindo Torres es ex concejal de Boadilla del Monte, fue tránsfuga en su día, y se le condenó en 2005 a nueve años de inhabilitación especial para el ejercicio de empleo y cargo público por un delito continuado de prevaricación.
En previsión de esta inhabilitación, Galindo Torres abandonó la política en 2003 y fue reemplazado por su hijo y actual concejal de Alternativa por Boadilla, Ángel Galindo Álvarez, en quien Gómez hace depender toda su argumentación.
Las palabras de Gómez respecto a Boadilla, son en la opinión del Ejecutivo una cortina de humo destinada a tapar lo ocurrido en el Ayuntamiento de Pinto. La semana pasada la Popular Miriam Rabaneda fue desbancada de la Alcaldía a favor de los socialistas mediante un pacto con un tránsfuga para permitir que saliera adelante un pelotazo urbanístico.
Si Gómez se ha atrevido a decir lo que ha dicho sobre Boadilla sin tener prueba alguna ¿Qué podríamos decir nosotros de lo ocurrido en Pinto y Parla? ¿Podríamos decir que se ha convertido en el adalid de los terratenientes y los tránsfugas de la Comunidad de Madrid? , han añadido.
La semana pasada, y en un ejercicio de distracción ante el bochornoso espectáculo vivido en Pinto, Gómez manifestó que algo olía a podrido en Boadilla, declaración a la que el alcalde de Boadilla, Arturo González Panero, contestó instándole a acudir a un tribunal a formalizar sus acusaciones o en caso contrario interpondría una querella por calumnias, tal y como ha hecho.
La respuesta dada por el secretario general socialista ha sido calificada por el Ejecutivo de Boadilla de increíble. Gómez apoya sus argumentos en las actuaciones de un terrateniente de Boadilla que ha perdido desde 1999 más de 40 juicios contra el Ayuntamiento de Boadilla del Monte. En sus declaraciones ni siquiera hace mención a los concejales de su Grupo Municipal.
De hecho, Ángel Galindo Álvarez, es el continuador político de su padre Ángel Galindo Torres. Galindo Torres es ex concejal de Boadilla del Monte, fue tránsfuga en su día, y se le condenó en 2005 a nueve años de inhabilitación especial para el ejercicio de empleo y cargo público por un delito continuado de prevaricación.
En previsión de esta inhabilitación, Galindo Torres abandonó la política en 2003 y fue reemplazado por su hijo y actual concejal de Alternativa por Boadilla, Ángel Galindo Álvarez, en quien Gómez hace depender toda su argumentación.
Las palabras de Gómez respecto a Boadilla, son en la opinión del Ejecutivo una cortina de humo destinada a tapar lo ocurrido en el Ayuntamiento de Pinto. La semana pasada la Popular Miriam Rabaneda fue desbancada de la Alcaldía a favor de los socialistas mediante un pacto con un tránsfuga para permitir que saliera adelante un pelotazo urbanístico.
Si Gómez se ha atrevido a decir lo que ha dicho sobre Boadilla sin tener prueba alguna ¿Qué podríamos decir nosotros de lo ocurrido en Pinto y Parla? ¿Podríamos decir que se ha convertido en el adalid de los terratenientes y los tránsfugas de la Comunidad de Madrid? , han añadido.